
Familiares y allegados expresaron su dolor tras la tragedia náutica en Miami Beach.
Dos niñas murieron este lunes en un accidente náutico ocurrido frente a las costas de Miami Beach, Estados Unidos. Una de las víctimas fue identificada como Mila Yankelevich, de siete años, nieta del productor argentino Gustavo Yankelevich y de la reconocida actriz y directora Cris Morena. La pequeña formaba parte de un campamento juvenil de navegación.
Según datos preliminares difundidos por la Comisión de Conservación de la Pesca y la Fauna de Florida (FWC), el choque se produjo cerca de las 11:30 de la mañana, cuando una barcaza colisionó contra un velero en el que viajaban seis personas, entre ellas cinco menores de edad. Como resultado del impacto, la embarcación se hundió rápidamente y sus ocupantes cayeron al agua.

Familiares y allegados expresaron su dolor tras la tragedia náutica en Miami Beach.
Las autoridades locales confirmaron que los participantes del campamento pertenecían a la Fundación de Vela Juvenil de Miami, un programa recreativo impulsado por el Miami Yacht Club. En un comunicado publicado en redes sociales, la institución lamentó lo sucedido y expresó que se encuentran recopilando información junto con los organismos de seguridad.
El grupo a bordo del velero estaba integrado por cinco niños de entre 7 y 13 años, además de una mujer que actuaba como consejera del grupo. Dos de las menores perdieron la vida, mientras que otras dos niñas permanecen hospitalizadas en estado crítico.
El portavoz del Departamento de Bomberos de Miami, Pete Sanchez, informó que recibieron varias llamadas de emergencia por un siniestro náutico cerca de Hibiscus Island. Los primeros reportes señalaban que una embarcación había quedado parcialmente sumergida y había personas desaparecidas.
A raíz de la magnitud del incidente, se activó un operativo coordinado con apoyo de diversas agencias locales. Los servicios de emergencia lograron recuperar a todos los ocupantes y trasladarlos para recibir atención médica.
La Guardia Costera de Estados Unidos confirmó que dos de las víctimas, una de 7 años (Mila Yankelevich) y otra de 13, fueron declaradas fallecidas en el hospital Jackson Memorial. Más tarde, se reportó que una tercera menor se encontraba en estado crítico.
Los sobrevivientes, incluyendo cuatro menores y la consejera, fueron llevados inicialmente al club náutico, y desde allí, los casos más graves fueron derivados a centros hospitalarios especializados.
Uno de los testigos del hecho, un niño de 9 años identificado como Enzo Piffaretti, relató a un medio local que presenció el accidente desde la orilla. Según sus palabras, “era un bote grande, la escapada (el velero) iba adelante y la barcaza no miró, los chocó de frente y todos salieron volando”.
Imágenes difundidas por la cadena Sky 10 mostraron a los equipos de emergencia realizando maniobras de reanimación sobre al menos una víctima, mientras que varios buzos se encontraban en el agua intentando rescatar a los ocupantes.
Las causas del accidente están siendo investigadas por la Guardia Costera estadounidense en conjunto con la FWC. De momento, no se informó si la barcaza involucrada pertenecía a una empresa o si era una embarcación privada.
Mila, la niña fallecida, había cumplido siete años en febrero. Hija de Tomás Yankelevich y Sofía Reca, era la hermana menor de Inti y nieta de Cris Morena y Gustavo Yankelevich. En redes sociales, su abuela le había dedicado un emotivo mensaje para su cumpleaños, recordando momentos compartidos y describiéndola como “una hadita feliz y libre”.
Durante el siniestro, Mila participaba de una actividad organizada por la Miami Youth Sailing Foundation, una entidad que promueve la navegación infantil y la formación en marinería desde edades tempranas. Según su sitio oficial, la fundación busca fomentar la competencia náutica y la recreación segura, a través del aprendizaje en comunidad.
La embarcación fue embestida de lleno por la barcaza, lo que provocó que los menores fueran expulsados hacia el mar. La velocidad del impacto y el hundimiento inmediato no habrían dado tiempo para reaccionar.
El episodio ocurre en pleno verano boreal, durante una jornada en la que muchos chicos participaban de actividades acuáticas. La tragedia generó una fuerte conmoción tanto en la comunidad argentina como en la ciudad de Miami, donde numerosos residentes se acercaron al club náutico para dejar mensajes y muestras de apoyo.